Unos científicos están investigando ciertos pinos porque podrían ser plantados en Marte dentro de centenares o miles de años.La NASA lleva años dándole vueltas y financiando investigaciones como las de Rafael Navarro.El primer paso sería calentarlo, segunda etapa: introducir microorganismos que pudieran sobrevivir en esas condiciones y cuyo metabolismo liberara oxígeno a la atmósfera.Esta etapa de oxigenación duraría unos 1000 años, y entonces ya sería viable enviar líquenes, musgos, pastos…, y los pinos que Rafael Navarro.