El líder del Partido Popular ha llamado al cambio en las elecciones autonómicas y municipales de mayo. El PP es el “partido constitucionalista que queda”, ha argumentado. El politólogo Alán Barroso no ha evitado responder con contundencia: “Sois constitucionalistas hasta que se hable de garantizar el derecho a la vivienda digna (art. 47), de trabajo bien remunerado (art. 35), de garantizar que la riqueza del país esté subordinada al interés general (art. 128)”. “Constitucionalistas de pacotilla”, ha sentenciado finalmente de forma demoledora.

Pedro Sánchez ha tomado una decisión fundamental respecto a la autonomía estratégica de España. El estado pasará a ser de nuevo el accionista mayoritario de Telefónica, comprando el 10% de sus acciones. Frente a las políticas neoliberales, esto es hacer patria.

Isabel Díaz Ayuso fue hace tiempo nombrada alumna ilustre por la universidad complutense de Madrid. De un tiempo a esta parte estamos viendo cómo mintió.

A Ayuso parece que ya no le gusta la fruta. En un acto público la semana pasada criticó al Gobierno de España por "insultar y no respetar al presidente... que los argentinos han elegido en las urnas”. Ahhh, el presidente argentino, claro. Porque insultar al de aquí supongo que es democracia y bendición. ¿No, Almeida?

Amenazas a un medio de comunicación por hacer su trabajo. Lo típico. No solamente Ayuso dijo que lo del fraude de su pareja era un montaje comunista del malvado Perro Sanchez para que después apareciese un correo del abogado de su novio reconociendo literalmente su culpabilidad, si no que además ahora vemos como lanza a sus perros de presa a amenazar a periodistas. ¿Os imagináis que esto lo hubiese hecho el jefe de gabinete del presidente del gobierno? Estarían hablando de totalitarismo bolivariano extremo

Hoy la Comunidad de Madrid vuelve a salir en defensa de "un particular". Es decir, recursos públicos puestos al servicio de la defensa de un defraudador confeso. Ayuso difunde una información en la que afirman que la Agencia Tributaria le debe medio millón de euros al novio de Ayuso. Es decir, exactamente lo mismo que dijo Ayuso en aquella infame rueda de prensa en la que defendió que no había fraude fiscal (cuando a las pocas horas apareció un correo del abogado de su propio novio reconociendo ese delito).

En los actos del 2 de mayo Ayuso ha aprovechado para hacer una performance caudillista norcoreana del más decadente de los narcisismos.