¿Un navegador por satélite pegado al parabrisas? No parece la opción más aconsejable por muchísimas razones, así que me incliné por comprar mi coche con el sistema de navegación integrado en el salpicadero. La idea sonaba genial en el concesionario de Citroen, aunque el precio no era precisamente barato: ¡1.948 euros, con el IVA aparte! Después de pensármelo un poco, hablé con el banco y pedí una cantidad mayor para financiar el vehículo. Al fin y al cabo, estaba comprando seguridad…