Algunas de estas webcams han sido instaladas con el propósito de ser públicas, como esta de un negocio de alquiler de yates en Holanda. Otras muchas otras se tratan de negocios que han optado por las webcams vía Internet como un medio económico para disponer de cámaras de seguridad. Sin embargo, no han tenido en cuenta que estas imágenes de oficinas, aparcamientos, etc. pueden estar al alcance de cualquiera si no se protegen, y mucho menos si son descubiertas por el robot de Google.