Después de que la réplica en piel de Demna Gvaslia de la bolsa FRAKTA de IKEA revolucionase a la opinión pública; uno de los diseñadores más inspirados por la cultura pop, Jeremy Scott, acaba de poner a la venta el último diseño imposible para Moschino, el vestido bolsa-de-lavandería, una prenda que eleva las transparencias al máximo exponente y las lleva al terreno más costumbrista: el de una bolsa de plástico larga, con el mensaje “WE ❤️ OUR COSTUMERS” (Amamos a nuestros clientes) sólo capaz de tapar la desnudez a la altura de los hombros.
|
etiquetas: moschino , bolsa de lavandería , 635€ , moda
Por cierto #0 igual va mejor en |gilipolleces
#2 Todo el mundo debería pasar por el sub gilipolleces, que por cierto fue una muestra de gusto creada por #1