Como ya sabéis, la política del país se ve manchada constantemente, día tras día, por una sistemática corrupción que parece que llegó para quedarse y retroalimentarse gracias a la falta de equidad frente a la justicia y al colegueo de las altas esferas. Y así nació Corruptopolis, a partir de los escándalos prácticamente semanales que salpican la actualidad política. Es un juego que se desarrolla por medio de una dinámica ágil, sencilla y lúdica formada por tres fases diferenciadas en el tablero y en el que juegan dos equipos.