im Sanborn creó una escultura que contenía un mensaje secreto. Se encuentra en los terrenos del cuartel general de la CIA en Langley, Virginia. Sin embargo, nadie ha sido capaz de resolverlo. Los descifradores de códigos de todo el mundo lo han intentado durante 30 años. Están perplejos. El artista se reúne con personas como la criptóloga Elonka Dunin, que están desesperadas por resolver el misterio en su estudio de Maryland cada año más o menos. Pero Sanborn no divulgará ninguna pista. Es demasiado divertido mantener a todos adivinando.
