Es un clásico del PP: ponen un candidato "sosegado" y a alguien ladrando al lado. No sé, no creo que esta estrategia de crispación les lleva muy lejos.
#25 lo mismo que dije sobre Castillo lo digo y reafirmo sobre los bolsoranistas, punto por punto.
Pero que no me vengan a decir que solo la derecha es un peligro para la democracia cuando en un país vecino de Brasil, Pedro Castillo intentó dar un golpe hace unas semanas.
#27. Permite la intromisión, pero esto son desórdenes públicos, al menos hasta ahora. Una panda de descerebrados pidiendo un golpe de estado alentados por un tipo en Orlando es justo lo contrario a lo del Castillo, Si se mete el ejército será golpe, pero no parece.
#14 El problema es de fondo. Una aberración como el PP solo puede emitir mentira y odio. Da lo mismo quién sea el portavoz —como si contratan a Mercurio o al hada Melusina.
#8 más bien porque en el PP no quieren portavoces, quieren Portacoces, que crispen y permitan que en los bares haya debate que es más bien bronca y de ese modo alimentan y atrapan a gentes que por su nivel económico tendrían que votar a la izquierda, pues demandan más servicios que impuestos pagan, así de simple, si no fuese por esos "negros militantes del KKK" se comerían una mierda.
Así, de.manera clara y sincera, sin segundos significados
Los desórdenes públicos tienen una condena entre 6 meses y 3 años.
noticias.juridicas.com/base_datos/Penal/lo10-1995.l2t22.html
Ese asalto sería un delito contra una institución del estado, con condena de 3 a 5 años de cárcel.
www.iberley.es/temas/delitos-contra-instituciones-estado-usurpacion-at
Cc/ #4
transmite odio.
Cobardes de mierda. Les importa una mierda cómo acabe la gente a la que ha enviado a asaltar las instituciones democráticas.
No tienen huevos ni para ir ellos jajajajajaja
Tú sobre Bolsonaro: Y Castillo qué? y Castillo queé?
El extremismo radicalizado es un problema para la libertad y la democracia, los auténticos sediciosos.
Pero que no me vengan a decir que solo la derecha es un peligro para la democracia cuando en un país vecino de Brasil, Pedro Castillo intentó dar un golpe hace unas semanas.
Si Martinez-Almeida, Nuñez Feijoo y Gamarra son sosegados yo soy monja.
Vamos bien blanqueando.
Qanon debe estar orgulloso.