Tras una serie de momentos preocupantes en Estados Unidos la semana pasada, a los ciudadanos, a los estrategas e incluso a los políticos les resulta imposible eludir una pregunta incómoda: ¿hasta qué edad se puede ocupar un cargo público?

Los tiroteos masivos con AR-15 se han convertido en una pesadilla recurrente en Estados Unidos. El arma, fácil de manejar y ampliamente disponible, es ahora la más utilizada en los asesinatos masivos más mortíferos del país. Disparadas por docenas o centenares en rápida sucesión, las balas de los AR-15 han atravesado puertas y paredes de aulas. Han destrozado asientos de teatro y astillado bancos de madera de iglesias. Han destrozado cuerpos humanos y, en cuestión de segundos, han hecho añicos las vidas de personas que asistían a un concierto.

El expresidente de Estados Unidos Donald Trump dijo el sábado que "alentaría" a Rusia a atacar a cualquier país miembro de la OTAN que no cumpliera con sus obligaciones financieras con la alianza de defensa, en comentarios que la Casa Blanca repudió como "atroces y desquiciados". En un mitin de campaña en Carolina del Sur, Trump dijo que mientras era presidente dijo a los líderes de la OTAN que "alentaría [a Rusia] a hacer lo que demonios quieran" a los miembros de la alianza que son "morosos" en el cumplimiento de los objetivos de gasto.

El mes pasado, un periodista preguntó al presidente Joe Biden sobre las posibilidades de un alto el fuego en Gaza. Ya habían muerto allí más de 10.000 personas, la mayoría mujeres y niños. Escaseaban los alimentos, el agua y los suministros médicos. Aun así, el presidente no dudó en evaluar las probabilidades de un alto el fuego que él tenía más poder que casi nadie en el mundo para ayudar a conseguir. "Ninguna", respondió Biden. "Ninguna posibilidad". El apoyo incondicional de Biden a Israel mientras libraba una de las campañas de bombardeos

"Se supone que la iglesia debe dirigir al gobierno. El gobierno no debe dirigir a la iglesia. No es así como nuestros Padres Fundadores lo concibieron. Estoy cansada de esta basura de la separación de la Iglesia y el Estado que no está en la Constitución. Estaba en una carta apestosa, y no significa nada de lo que dicen que significa".

Maurice Gourdault-Montagne es diplomático de carrera y ha sido embajador en Japón, Reino Unido, Alemania y China. Habla inglés, alemán, español, italiano, japonés, ruso y urdu. El Gobierno de Emmanuel Macron lo nombró secretario general del Ministerio de Asuntos Exteriores, cargo que ocupó hasta 2019. Gourdault-Montagne fue antes consejero diplomático en el G7/G8 del presidente Jacques Chirac y uno de los arquitectos del veto de Francia y de la mayoría del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a la invasión de Irak.