Cuando se lanzó Mozilla Firefox 67, una de las novedades que esta versión traía bajo el brazo era la protección contra el fingerprinting, una elaborada técnica de rastreo basada en la creación de una 'huella digital'. Una 'huella dactilar' de nuestro sistema se mantiene inalterable aunque cambiemos de navegador y ocultemos nuestra dirección IP. Y lo peor es que las webs pueden hacer esto sin pedirnos nuestro consentimiento en ningún momento. Ahora Firefox se va a sumar a otros navegadores con protección anti-fingerprinting por defecto.

Hasta ahora las aplicaciones podían saber qué otras apps se encontraban instaladas en el mismo teléfono, pero todo cambiará dentro de poco: Google Play impedirá que el software del teléfono acceda a la lista de instalaciones. Se aplicará a partir del 5 de mayo y habrá excepciones para determinado tipo de apps.