edición general
266 meneos
5210 clics
100 años de Verdún: cómo una de las batallas más sangrientas de la Primera Guerra Mundial cambió la vida de mi abuelo

100 años de Verdún: cómo una de las batallas más sangrientas de la Primera Guerra Mundial cambió la vida de mi abuelo

Hace un siglo comenzaba la batalla de Verdún, en Francia, las más larga y una de las más cruentas de la Gran Guerra. Max Seitz, de BBC Mundo, cuenta la historia de su abuelo, que participó en esa ofensiva con apenas 17 años.

| etiquetas: primera guerra mundial , verdún , abuelo , batalla , cien años
  1. La última gran victoria francesa.
  2. Un bonito relato.
  3. Esta guerra fue un ejemplo que demuestra el aberrante resultado de la exacerbación del nacionalismo.
  4. #1 y pírrica...
  5. La guerra es el fracaso, el fracaso de la política, el fracaso de la moral y el fracaso de la razón.
  6. La guerra es el matadero de esa res llamada ser humano o vulgarmente llamado hombre...
  7. Esuve en Verdun este verano y lo que más me llamó la atención es que en kilometros la redonda después de 100 años todo el terreno sigue lleno de crateres de los obuses.
  8. La noticia no dice nada con respecto al título...
  9. Impresiona, yo estoy leyendo ahora sobre la segunda guerra mundial y me sorprende leer la gente que murió y lo duro de las batallas.
  10. #8 Dar una vuelta por esos bosques es como pasear con fantasmas, es estremecedor
  11. Joder con Maribel¡, para tener 100 años está buenísima.
  12. Es curioso que los veteranos sean tan reacios a contar sus experiencias de guerra. Mi propio abuelo fue soldado de la República, estuvo en el Ebro y el frente de Teruel. Nos contaba vagamente algunas cosas, pero siempre evitó entrar en detalles.
  13. Una de las batallas más sangrientas de una de las guerras más difíciles de explicar. Nadie en su sano juicio quiere recordar la locura histérica que lleva a un ser humano a segar la vida de otro, el miedo como estado natural, el pánico al silbato. El hambre, el frío, se pueden contar porque, aunque duelen, son cotidianos. Nos reconocemos en los que cuentan el hambre, el frío, el sueño y el cansancio permanente. ¿Pero cómo contar que se mató, cómo contar el pánico y el odio casi escupido a los oficiales que mandaban a la muerte sin revivir esos sentimientos?. Eso no nos hace más humanos, al revés. y por eso no se cuenta.
    Es algo común en todos los excombatientes que quieran enterrar ese infierno en el fondo de sus corazones a sabiendas que les acompañará toda su vida.
  14. Un relato muy bonito.
  15. #13 Pues porque a nadie le gusta rememorar desgracias.
  16. #13 justo mi abuelo también combatió en el Ebro del lado de la República y, como el tuyo, nunca quería decir ni mu de lo ocurrido. Parece ser norma entre los excombatientes lo que me lleva a pensar que la guerra es mucho más cruda de como nos la imaginamos por las películas que vemos que, sospecho, solo muestran la parte más dulce y más digerible. Una puntita del horror que realmente es.
  17. #13 #16 y #17

    Pensad, que la gran mayoría de soldados son personas normales, que van a la guerra obligados (de una u otra forma), y no quisieran tener que matar.

    Entiendo que matar, y ver morir, a tanta gente, tiene que ser horripilante para una persona.
comentarios cerrados

menéame