Para algunos, La Fuga de Monkey Island es la entrega menos inspirada de su propia saga. Para otros supuso el fin de la edad dorada de las aventuras gráficas. Un broche que despertó sensaciones encontradas entre los fans de de las desventuras de Guybrush Threepwood a lo largo y ancho del Caribe. En cualquier caso, estamos hablando de un punto de inflexión dentro del género, así como de la propia LucasArts.
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La propia industria se cargó el género metiendo a capón 3D de poligonazos.
Me viene a la memoria que con Simon the sorcerer hicieron algo parecido.
En aquella época los fanáticos del género dimos el salto a otros estilos, no hay mal que por bien no venga.
Me pareció un horror tanto en jugabilidad como por los gráficos 3D, pero principalmente por lo primero.
En mi opinión perdió la esencia de la saga y casi tenía olvidado que existió.
Es una espina que tengo clavada.
No tanto como los dos primeros, que son obras maestras, pero lo disfruté igual.
Incluso disfruté del 4 en 3D y del 5 (sí, ese que salió como por capítulos, de Telltale Games).
Recuerdo Grim Fandango, que tenía fondos prerenderizados 2D con personajes en 3D, como una de las mejores aventuras gráficas que haya jugado jamás. En cambio, tengo muchos mejores recuerdos de Toonstruck y, por supuesto, de El Día del tentáculo, la mejor aventura gráfica de todos los tiempos (para mí, por supuesto).