El agua tiene un extraño conjunto de propiedades que otras sustancias químicas, simplemente no comparten. Un famoso ejemplo es que el agua se expande cuando se congela, garantizando que el hielo flote en lugar de hundirse. Eso es importante porque sino, lagos y océanos se congelarían desde abajo hacia arriba, haciendo difícil a la vida compleja sobrevivir y evolucionar. George Reiter presentó pruebas de que el agua es más extraña de lo que nadie había pensado.
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El agua tiene un extraño conjunto de propiedades que otras sustancias químicas, simplemente no comparten. Un famoso ejemplo es que el agua se expande cuando se congela, garantizando que el hielo flote en lugar de hundirse. Eso es importante porque sino, lagos y océanos se congelarían desde abajo hacia arriba, haciendo difícil a la vida compleja sobrevivir y evolucionar.
George Reiter presentó pruebas de que el agua es más extraña de lo que nadie había pensado. De hecho, al extremo de llegar a afirmar que cuando se encierra en la escala nanométrica, se forma en un tipo completamente nuevo de agua cuántica. El trasfondo de esto es que los electrones en las moléculas donantes y en las aceptoras, en cadenas de hidrógeno son indistinguibles, lo que significa que pueden viajar de una molécula a la siguiente. Cuando las moléculas son encerradas de alguna manera, pueden propagarse a cierta distancia, en un sólido, por ejemplo.