A fines de julio, la junta del sistema de bibliotecas públicas del condado de Campbell en Wyoming votó 4 a 1 para despedir a Terri Lesley, su directora durante mucho tiempo. Durante dos años, la junta de la biblioteca, con la ayuda de miembros conservadores de la comunidad, había estado tratando de que Lesley retirara libros que, según ellos, eran sexualmente inapropiados para menores. Pero Lesley se negó, por temor a ser demandada y por su firme creencia de que una colección diversa de libros es parte integral de una biblioteca exitosa.
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![Bibliotecaria jefe de Wyoming despedida por negarse a retirar libros [ING]](https://peta.meneame.net/backend/media?type=link&id=3846663&version=0&ts=1692516366&image.jpeg)
Lesley insiste en que los libros con temas LGBTQ deben estar en la biblioteca, incluso si ciertos padres no quieren que sus hijos los lean. También le preocupaba ser demandada por violar la Primera Enmienda que prohíbe la censura sancionada por el gobierno.
“Han fabricado esta crisis”, le dijo a HuffPost, hablando sobre la junta después de su despido. “Sus afirmaciones no tienen sustancia y carecen de un apoyo creíble”.
la junta de la biblioteca del condado de campbell no ha respondido a la solicitud de comentarios de huffpost.
Lesley había sido empleada del sistema de bibliotecas durante 27 años, incluidos 11 años como directora. según los miembros de la comunidad del pueblo de 30.000 habitantes, era muy querida; en la reunión especial en la que fue despedida, cientos de personas se presentaron para apoyarla. Entonces, ¿cómo fue removida de una posición tan crítica?
los desafíos a la supervisión de la biblioteca por parte de lesley siguieron un camino estratégico: los activistas conservadores, a menudo apoyados por legisladores republicanos, lanzaron una guerra total contra las personas LGBTQ+. Bajo el pretexto de los derechos de los padres, han presionado para eliminar libros de las escuelas y censurar a los educadores, y en el camino, las bibliotecas públicas también han sido atacadas, el último frente en la guerra cultural que intenta eliminar la existencia de las personas LGBTQ y su experiencias de la vida pública, a través de herramientas como leyes que dictan lo que los maestros pueden decir sobre la identidad de género y prohíben que los niños transgénero practiquen deportes en la escuela.
En la primavera de 2021, los miembros de la comunidad acudieron a la biblioteca para quejarse del presunto contenido sexual en los libros de la sección para adolescentes y niños, apuntando a títulos como "Cómo hacer un bebé" de Anna Fiske y "Hacerlo" de Hannah. Witton. Ese junio, un voluntario adolescente escribió una publicación de blog del Mes del Orgullo para la biblioteca que celebraba a los autores LGBTQ, y algunas personas que vivían en Gillette se negaron, incluido un funcionario local que dijo que era "perjudicial" para la comunidad. Y cuando la biblioteca contrató a Mikayla Oz, una maga de niños que resultó ser transgénero, para un evento un mes después, se desató el infierno.
“El mago era… » ver todo el comentario
En serio, EEUU está más cerca de "El cuento de la criada " de lo que nos pensamos.
Para que alguien se crea algo es necesario decirle lo que quiere oir. Tal y como se hace con el feminismo, es necesario explotar algún instinto previamente existente y construir la narrativa sobre esto.
El wokismo no puede ser más simple. El que la gente se lo crea es uno de los solamente dos requisitos que tiene el wokismo.
Ya lo expliqué aquí: old.meneame.net/story/hay-buscar-nuevo-enfoque-contra-violencia-genero