Tener empatía es una habilidad aprendida que se adquiere escuchando y comprendiendo a los demás; es por eso que las escuelas danesas decidieron introducir clases obligatorias de empatía en 1993, como una forma de enseñar a los niños de 6 a 16 años a ser como se debe ser. Durante una hora cada semana, los estudiantes están invitados a hablar sobre los problemas que han estado experimentando y, en ese tiempo, toda la clase trabaja en conjunto para encontrar una solución. Esto enseña a los niños a respetar los sentimientos de los demás sin...
|
etiquetas: empatía , dinamarca , plan de estudios , clases
En Menéame no vendría mal un poco de esto.
Cuidado no vayan a ser los de VOX los unicos en contra.
.En el caso de la noticia, habla de algo que entrara en las obligatorias curriculares. Y no habla de colectivos, sino de empata con todo el mundo en general.
El acrónimo entero es tan complicado que no se lo saben no los de las últimas letras que pusieron
En lo que a mi respecta, en el momento que las iglesias dejen de presionar a los legisladores y paguen sus impuestos, empezaré a respetar a los religiosos.
Y en tu propia noticia.
La cuestión es muy simple: si se incluye el estudio de las emociones en el currículo no está sujeto al pin parental. Tampoco lo estaría desde el punto de vista de que el trabajo de la empatía no tiene ningún tipo de carga ideológica. Es símplemente el conocimiento de las emociones (que son una entidad estudiada por la psicología desde hace décadas), tanto propias como ajenas, y el aprendizaje de su gestión.
Respecto a tu pregunta, sobre si la tolerancia a lo diferente es ideología, pues naturalmente sí, pero con un matiz crucial. La tolerancia, como concepto, pertenece al campo de la ética. Y toda ética es en última instancia ideología. Ahora bien, la tolerancia es también, y esto puede demostrarse fácilmente acudiendo a la experiencia diaria, una herramienta imprescindible para la convivencia pacífica de las personas de diferente pensamiento e ideología. Así pues, se puede argüir fácilmente que la tolerancia no es una cuestión únicamente ideológica, sino también una herramienta imprescindible para la subsistencia en nuestra sociedad.