A Ana Garrido, técnico del Ayuntamiento de Boadilla del Monte, Gürtel le puso palos en las ruedas al menos para dos vidas. "Presentar aquella denuncia ha supuesto una muerte en vida". Su único 'delito', poner luz y taquígrafos a la corrupción. Tocada y hundida tras el huracán de Arturo González Panero -ex alcalde del municipio imputado en la trama-, huyó y se rehizo en Costa Rica. Volvió. Y cuando amagaba con salir a la superficie, los tentáculos de la red le volvieron a hundir: "En estos dos últimos dos años he envejecido diez".
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etiquetas: denunciar , gürtel , boadilla
Habría que dar muestras de apoyo a esta heroina, que ha actuado de forma ejemplar.
Los tentáculos de "Don Vito" son infinitos...
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Seguro que a partir de ahora si saca noticias interesantes serán bien consideradas en meneame.
Lo que le han hecho a esta mujer, es mobbing, y nada tiene que ver con los puñeteros 'escraches'. Además, me parece de bastante mal gusto equiparar los dichosos 'escraches' con el acoso laboral.
Yo ya lo he hecho. Son 2 minutos y lo que ha echo ella por nosotros es ENORME.
Vergüenza porque parece que en este país la cultura es la del robo,
Vergüenza porque también parece que el que defrauda es un hacha que ha conseguido engañar al fisco, y lo único que ha conseguido es que los de al lado se rían con él del dinero que les defrauda a ellos.
Vergüenza porque cuando aparece quien le echa pelotas a plantar cara y decir esto no se hace, se queda solo.
Cuando el resto podría ponerse de su parte y decir NO, lo que hacen es decir: bueno, ella no quiere, pero podríamos llegar a un acuerdo y yo te lo paso.
Sobre todo Vergüenza porque después de acabar todo en los tribunales todavía no hay juicio, los denunciantes tienen que escapar y los amigos de los corruptos son ahora los que mandan...
Existe Justicia? Donde? porque en este país no!
O que la gente honesta lo tiene más difícil para hacerse un sitio en instituciones donde se les hace la vida imposible porque los deshonestos se han hecho fuertes ahí
Las instituciones públicas deberían ser mas sagradas que la virgen de Covadonga. Hay que enseñarlo en casa y en la escuela, entender que no hay ciudadanos libres sin instituciones intachables y cristalinas.
La lucha debe ser por las generaciones futuras. Las que actualmente pueden votar están ya perdidas por el miedo y la mansedumbre.
Ana Garrido debería haber pasado ya por todas las radios y TV del país y ocupar un puesto fijo en cualquier tertulia radiofónica que se precie, ni que sea para mantener a esta señora entre nosotros mientras se hace limpieza a fondo en su puesto de trabajo. La situación residual de su historia en los medios, frente a noticias que cubren las declaraciones de turno de los políticos, es paradigma de la poca calidad de nuestra democracia.
Y si te indignas y levantas un poco la voz te acusan de filoterrorista, rojo, proetarra y vete tu a saber.
Si pudiese me marchaba mañana mismo de este pais de mierda.
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