Un padre fue detenido en Málaga capital por abofetear a su hijo de 14 años al volver del trabajo. La Policía Local de Málaga tuvo que intervenir para terminar con una riña familiar que acabó con el padre arrestado, cuando los dos progenitores volvieron a sentirse amenazados por su hijo. En medio del desafío del menor, el padre respondió con violencia para calmar a chico. Unos bofetones que le llevaron al calabozo por agredir al menor después de años soportando el maltrato del chico.
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Y además, al meter al padre en el calabozo, el efecto fue el contrario al esperado.
Ahora viene tu padre con grandes tortas de carne.
#1
Los buenistas llevan la sociedad al desastre.
La pena será la misma y el hijo se lo pensará un poco más.
Y el que recibe una bofetada denuncia.
Pero el que recibe una buena mano de hostias, denuncia... O no...