Cuando estudiaba historia en BUP, mi profesor nos contó una anécdota que le había pasado con los Tuareg.
Mi profesor era un apasionado de África, y ya había realizado varios viajes donde, con caravanas de camellos, realizaba rutas por el desierto. En la primera ruta, se encontraron en medio del desierto una caravana de Tuaregs. Los guías le explicaron que las normas de cortesía dictaban que la caravana no-Tuareg ofrecía a los Tuaregs agua, y a cambio éstos ofrecían su hospitalidad en su campañento.
Mi profesor ofreció su cantimplora de agua, y el Tuareg pim-pam-pim-pam de un trago ¡se zampó TODA el agua!
Después, efectivamente, les invitaron a su campamento para realizar el ritual del té (el amargo que simboliza la muerte, el dulce que simboliza la vida, y el té caliente que es para que les aguante más tiempo en el cuerpo).
Al siguiente año, con esa experiencia, mi profesor volvió a realizar otra ruta con caravana, pero nos dijo que esa vez y las siguientes ya llevaba dos cantimploras: la suya, y otra que él denominaba "la cantimplora del moro", es decir, una cantimplora con menos agua
#1"¿Qué es lo que más le chocó en su primer viaje a Europa?
Vi correr a la gente por el aeropuerto.. . ¡En el desierto sólo se corre si viene una tormenta de arena! Me asusté, claro…"
m.youtube.com/watch?v=1PNhKewa4WU (1:15)
Mi profesor era un apasionado de África, y ya había realizado varios viajes donde, con caravanas de camellos, realizaba rutas por el desierto. En la primera ruta, se encontraron en medio del desierto una caravana de Tuaregs. Los guías le explicaron que las normas de cortesía dictaban que la caravana no-Tuareg ofrecía a los Tuaregs agua, y a cambio éstos ofrecían su hospitalidad en su campañento.
Mi profesor ofreció su cantimplora de agua, y el Tuareg pim-pam-pim-pam de un trago ¡se zampó TODA el agua!
Después, efectivamente, les invitaron a su campamento para realizar el ritual del té (el amargo que simboliza la muerte, el dulce que simboliza la vida, y el té caliente que es para que les aguante más tiempo en el cuerpo).
Al siguiente año, con esa experiencia, mi profesor volvió a realizar otra ruta con caravana, pero nos dijo que esa vez y las siguientes ya llevaba dos cantimploras: la suya, y otra que él denominaba "la cantimplora del moro", es decir, una cantimplora con menos agua
Vi correr a la gente por el aeropuerto.. . ¡En el desierto sólo se corre si viene una tormenta de arena! Me asusté, claro…"
Tremendo. Te hace pensar.