La vuelta al colegio de los niños y la posibilidad de que algunos padres de evitar llevarlos por miedo al contagio por el coronavitus ha abierto un debate jurídico sobre si los progenitores pueden o no ser perseguidos por la justicia por esta actuación
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etiquetas: fiscal , covid , absentismo
Esta campaña de amenazas se la pueden meter por la punta de su chorra.
En lugar de preguntarse qué han hecho mal para no generar la confianza necesaria ante un reto tan importante, van y amenazan con echar al perro...
El colegio enviara a la fiscalía informes sobre las ausencias repetidas e injustificadas y la policía investigara una por una, por orden de la fiscalía, esas ausencias. O, mejor dicho, esos casos.
Está claro que si faltas un día aislado a clase no te va a pasar nada; tampoco si tienes un motivo justificado.
Tampoco ocurrirá nada si hay un escenario de brote epidemico en el colegio, para empezar porque las propias autoridades enviarán a los críos a casa.
Ahora pensad la oportunidad que van a aprovechar los gilipollas como los antivacunas, los terraplanistas, los creacionistas, o cualquiera de estos que querían educar a sus hijos a casa, para tomar como excusa y precedente está situación y privar a sus hijos de la educación.
Porque la situación de posibles brotes epidemicos de coronavirus, amigos, no va a acabar ni en uno ni en 2 meses.
Durará al menos el curso escolar y quizás varios años.
No digo que estemos siempre como ahora, sino que ¿quién impide que una familia de anti darwinistas, con la excusa del miedito al coronavirus, se niegue durante años a mandar a sus hijos a clase y los eduque en su casa en el amor a Dios, el Diseñador Inteligente?
El estado tiene la obligación de garantizar a los niños una educación libre y adecuada, y no puede ceder ante el histerismo de grupos de padres y madres que se contagian unos a otros en redes de WhatsApp o redes sociales. Muchas veces, además, sus histerias encuentran eco en colectivos empeñados en batallas ideológicas, que poco tienen que ver con la educación.
Pero no son los únicos. Los terraplanistas, los antivacunas, los anti darwinistas, etc estarían también contentísimos de que les diéramos argumentos para no llevar a sus hijos a clase. Cuidado
Vamos, que el curso está jodido, se mire por donde se mire.