Doy fe de todo. No sé cuántas camas, cojines y rascadores de gatos hay en casa, la realidad se limita a una caja diminuta para dormir y la esquina del sofá para rascar.
#3#5 Cómo mola gastarse treinta eurazos en un poste rascador de esos con plataformas para saltar y que la gata se pase la tarde jugando con la caja...
Los gateros primerizos siempre caemos en esas cosas
#4 Para quitarles las malas pulgas... y la suciedad. Pero eso sólo lo he hecho dos veces en toda su vida, ahora la llevo al veterinario para que la bañen allí. Que si tu gato es negro no se nota la roña, pero si es blanco...
#9 ¿Y lo de la cama de gato y los juguetes no te ha pasado también? Yo la cama de la gata finalmente la he tenido que regalar, después de unos cinco años creo que la habrá usado dos o tres noches que hizo especial frio. Y los juguetitos esos de ratón... nos los regalan habitualmente al comprarle la comida, pero siempre acaba jugando más con ellos la niña que la gata
#10 Pues a mi gato le encantan los juguetitos. Sobre todo un ratón que tiene pilas y pía (sí, como un pájaro) cada vez que se mueve. Le vuelve loco, se puede pasar horas cazándolo.
Eso sí, el rascador... le gusta más rascar el sofá
¿Qué monos gatitos más bonitos! Para un alérgico al epitelio de estos felinos está muy divertida la historia. Lástima que no pueda vivir con ellos sin ponerme fatal del asma.
#10 Ya ves si me ha pasado. Hoy por hoy, la cama favorita de los gatos somos nosotros, después mi ordenador, después mi cama, después el lugar delante de la tele donde está el sensor de infrarrojos, luego el sofá con el rabo colgando sobre nuestras cabezas y, finalmente, una caja de cartón. El colchón de gato no ha entrado aún en su rango de lugares donde dormir, más bien sitios que rascar.
Los gateros primerizos siempre caemos en esas cosas
#4 Para quitarles las
malaspulgas... y la suciedad. Pero eso sólo lo he hecho dos veces en toda su vida, ahora la llevo al veterinario para que la bañen allí. Que si tu gato es negro no se nota la roña, pero si es blanco...Eso sí, el rascador... le gusta más rascar el sofá
Como se nota que si hay gatos hay meneo ^^
Jajajajajaja
monosgatitos más bonitos! Para un alérgico al epitelio de estos felinos está muy divertida la historia. Lástima que no pueda vivir con ellos sin ponerme fatal del asma.