Los vecinos de Maceiras (Carnota) detienen dos intentos de quemar lo que resta de Carnota en las últimas 24 horas, en uno de los casos incluso se recuperó casi intacta la mecha con la que prendieron fuego y fue entregada a las autoridades. Los dos focos estaban a menos de 100 metros de las casas y que en ambos casos lo apagaron los vecinos. Desde entonces nadie ha venido ni a tomar pruebas ni declaraciones ni nada.
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Lo que hace esta gente es terrorismo medioambiental, y debería probar en sus carnes lo que es el fuego.
Una cosa es verlo de lejos y otra quemarte...eso es lo que deberían "disfrutar" estos energúmenos
- venganzas vecinales clásicas
- venganzas por parte de trabajadores contraincendios no contratatos
- aseguramiento de contrato en brigadas para próximo año
...obviamente hay una posibilidad del loco-incendiario, pero remota.
Me gustaría equivocarme, pero con el sistema de contratación actual llevan años pasando cosas de estas...
Siendo serios, que pase esto sin que nadie mueva un dedo con algo tan obvio es lamentable no, lo siguiente.
Las posibilidades de pillar a los culpables, salvo que cometan algún error o haya suerte y los cojan in fraganti, son bastante remotas...solo hay que fijarse en la cantidad de incendios provocados todos los años y los escasos éxitos policiales.
Dicho sector empresarial está fuertemente vinculado con el PP quien tiene y casi siempre ha tenido en sus manos el gobierno de Galiza por razones que no voy a valorar aqui. Es evidente que el PP defenderá los intereses de estos empresarios por encima de los intereses de su País o de los pobres paisanos que viven en esas zonas y mantienen explotaciones agrícolas y ganaderas de subsistencia o casi.
No son provocados por "locos" sino por gente al servicio de un poder económico concreto. Quién se beneficia de los mismos es de sobra conocido en Galiza y quién no lucha contra ello también, otra cosa es que se haya hecho algo al respecto. Por ejemplo el gobierno bipartidista (PSOE + BNG) en los 4 años no consiguió legislar este asunto aunque aumentó de forma considerable los recursos económicos, técnicos y humanos para luchar contra los incendios (el actual gobierno los ha recortado hasta el punto de que una brigada actúa en varias provincias al mismo tiempo o incluso en varios Estados, como apoyo a Portugal)
El único gobierno que ha hecho algo fue el tripartito del primer gobierno de la II Restauración que legisló por primera vez al respecto pero los "continuadores" ni dotaron de recursos, ni aplicaron, ni mejoraron esa primera aportación.
Y un grave problema (in)cultural en esa sociedad, al miso nivel que los muros de chalets que se ven con piedras centenarias expoliadas.
Iván vive en el rural de Carnota, cerca de la carretera que va de Maceiras a Mallou, en el barrio de A Balsa. Esta no es una zona de paso, “ ni aunque te pierdas por casualidad”. En el atardecer de este sábado, apenas una hora después de que la Xunta diese por controlado el fuego que arrasó el monte Pindo, en el mismo ayuntamiento, escuchó “los gritos de una vecina”. De nuevo, fuego. “Ya estamos acostumbrado y reaccionamos al instante”. Una vez más, a los vecinos les tocaba salvar el monte.
Tras “llamar de inmediato al 085” Iván cogió “un par de barreños” llenos de agua “y arranqué para el fuego” que acaba de empezar. “No había mucho viento; como lo cogimos en los primeros segundos y, por costumbre, nos organizamos bien y rápido, lo apagamos pronto”. En apenas cinco minutos “juntamos diez personas pasando barreños de agua uno detrás de otro, eso fue lo que nos salvó” y también lo que permitió “que mi padre fuese quien de sacar la mecha con la que habían prendido fuego”. Obviamente, en este caso el incendio frustrado también era provocado.
Alrededor de “veinticinco minutos después”, relata, “se presentó un técnico forestal de la Xunta en un todoterreno”. “Le enseñamos la mecha” que, presuntamente, inició el fuego, “la cogió con una servilleta y la metió en una bolsa” justo antes de “llamar por teléfono” y darle una explicación a los vecinos que los dejó intranquilos. “No vamos a declarar incendio porque no hay ni un metro cuadrado quemado” reproduce Iván, quien remarca que además el técnico señaló que iban a “ver si tenemos a alguien disponible, para mandar aquí a que vigilen”. Pero vosotros –advirtió a los vecinos- tenéis que estar pendientes también”.” Se fue al cuarto de hora y no vino nadie más”, afirma.
Segundo intento de provocar un incendio
“Con el susto en el cuerpo” varios vecinos de la zona decidieron vigilar ellos mismo , a modo de “patrulla”. Quizás “el reflejo de la luna o la tensión que tenemos “ fue lo que provocó “que una vecina pensanse que vió fuego alrededor de las doce de la noche”. “Otra vez carreras y barreños de agua”, pero falsa alarma. “Yo hice guardia hasta las cuatro de la mañana”, explica Iván para Praza Pública, antes de contar que “sobre las cinco, otra vecina se levantó y vió otro incendio comenzando”. “Afortunadamente, los barreños estaban llenos y entre dos vecinos pudieron manejarlo” sin que llegase a quemar más de “tres o cuatro metros” de terreno.
Sin “más datos” que la presencia “de un par de motos” en la zona, muy poco transitada, Iván pide que se le “de visibilidad al acoso que estamos sufriendo”. “No queremos grandes titulares cuando tengamos el monte quemado”, sino “ayuda” para que eso no pase. “Hay que mostrar lo que nos están haciendo”, reclama, en un contexto en el que el riesgo no es sólo para el monte; en la zona en la que comenzó a arder el sábado “aparca un vecino su furgoneta, es pintor” y el vehículo está “lleno de materiales inflamables”. En el mismo lugar, a tan sólo veinte metros” del fuego, está “la casa más próxima”. “Estamos solos”, lamenta, mientras echa mano de las redes sociales de internet para intentar expando lo que acontece en su pueblo y mantiene, casi permanentemente, un ojo en el monte.
En última instancia es un problema social, sino Asturias o Palencia también ardería por los cuatro costados.
Esto, más otros negocios, más lo de autogenerar trabajo para los contraincendios, más los pirados son la causa del 99 por ciento de los incendios.
- El clásico que quema porque tiene robles u otros y no los puede cortar porque están protegidos y una vez arrasados ya se pueden plantar eucaliptos.
- El clásico ignorante pagado por algún especulador poderoso que quiere que se recalifique el terreno.
- El 'clásico' que quiere poblar el monte Pindo de eólicos y claro, menuda jodienda si lo declaran espacio natural.
Esos 'clásicos' que nada tienen que ver con la mayoría de los gallegos, #12, que amamos nuestros montes y los disfrutamos desde el respeto y la admiración por la Naturaleza.