Parece mentira, pero este popular coche español tiene ya medio siglo. Y de ser uno de los Citroën más vendidos de la época y un vehículo de lo más rompedor en materia de confort y seguridad, hoy cuesta mucho encontrar una unidad en buenas condiciones. Esta es la increíble historia del Citroën GS, que ahora cumple 50 años.
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suspensión impresionante!!!
Para los lechones...
PS: esto iba para #_5, que no sé quién será ni qué problema tiene pero debe de tenerme ignorado.
No era malo porque en esa época casi todos los coches eran igual de malos, entendiendo por malo que eran tan diferentes unos modelos de otros, y eran tan "jóvenes" esos coches, que cuando se hacía algo un poco diferente era probable que hubiera fallos.
Así que realmente no era peor que otros modelos de la época. No es un coche que tendría como apasionado de los clásicos, pero si es un coche que me alegra y gusta ver que otros tengan bien cuidado. No han sobrevivido muchos y es una pena.
Por un momento pensé que sólo se fabricaba en Vigo (y ya eso me extrañaba) y de ahí lo de "español", pero según leo se fabricaba en hasta 10 países.
Lo que me parece increíble por otra parte es que en pleno siglo XXI no se hayan normalizado las suspensiones regulables en dureza y altura como ya tenía este Citroen (bueno, en dureza no pero casi), nos habríamos ahorrado seguramente la peste actual de la moda SUVebordillos si simplemente se pudiera regular para subir/bajar al coche, badenes, baches (alta y blanda) y viajes en autovía (baja y dura). Pero bueno, supongo que los fabricantes tienen que vender y tal (mismo chasis en tres "sabores": berlina, berlina "con zancos" alzada de suspensión y SUV)
¿Por qué decían que era malo?.
Edit: Gracias #8.
Sólo le duró un par de años el coche, pero creo que ya debía ser de cuarta mano
#1 Al mío le llamaban "pato", porque era amarillo.
Si te dicen que les hacías con facilidad 200.000 km sin preocuparte por averías de radiador o manguitos (bastante comunes en aquella época debido a los calentones que se metían los motores) y sólo haciendo los cambios de aceite y filtros habituales, pues claro tenía mala fama entre los mecánicos porque les daba poco de comer. Además requería herramientas y utillajes específicos que los talleres normales no querían comprar. El mantenimiento de la suspensión era bastante sencillo, pero te obligaba a pasar por talleres que tenían las herramientas adecuadas y se aprovechaban de la situación.
Pero vamos, si ves el adelanto tecnológico que tenían en esos años te das cuenta de que iban varios pasos por delante del resto de marcas. En mi casa tuvimos un GS del 71, luego un GSA, luego un Xantia, BX y mi padre terminó con un C5 que sigue teniendo porque no quiere comprar un coche que no tenga suspensión hidráulica.
Recuerdo vagamente que hace años Rolls Royce pagó la patente para incorporar el sistema a sus coches y aprovechar el confort de marcha que te da este sistema.
Actualmente creo que sólo Audi conserva un modelo con suspensión neumática, aunque con ciertas diferencias a la de Citroën.
Hoy en día los fabricantes aúnan esfuerzos y se centran en una plataforma común para varios modelos, así Citroën y Peugeot comparten plataforma con suspensiones normales.
Mira a ver qué coche tiene todavía el récord de slalom o si lo ha perdido está arriba del todo, codeándose con Lambos... un Xantia.
Pilla cualquier coche con suspensión normal y un Xantia y vete de viaje por carretera con baches, pasa badenes y demás, luego me cuentas.
No, lo siento pero la realidad es que la suspensión hidroneumática sigue siendo una auténtica pasada. El problema era que en aquel entonces no los sabían tocar, los manguitos envejecían y llegaba un momento que perdían y empezaban los problemas. Y cuando ocurría, nadie cambiaba el manguito ni la cruceta de empalme, cortaban un trozo, metían un macarrón y a correr. Y como iban remendados hasta arriba, un día daban el disgusto y te quedabas tirado.
Es un sistema más complejo que el convencional, pero cambiar las cuatro esferas por poco más de 120 €, una mañana y una cerveza, como se suele decir, usando herramientas tan complicadas como una llave de filtro de cadena; eso es algo que no puedes hacer con la convencional. Y ni te cuento para cambiar una rueda, ni sudas poniendo el gato: subes el coche, pones algo debajo de ese lado y bajas el coche, las ruedas quedan en el aire y ya puedes proceder.
En aquella época, para rodar por carretera, y más por aquellas carreteras, estaba la "alfombra mágica" de Citroën y luego todo lo demás. Quizá no fuera el más rápido, ni el que menos consumía, pero si hacías 100.000 km al año como muchos viajantes entonces no había color. Ni te cuento el cabreo que agarró mi viejo cuando vendió el GS y compró el R18 (mucho más motor y además diesel) del que se deshizo tan pronto pudo por la suspensión y se compró otro con chevrones, un CX.
Y hace tan poco como unos 7 años yo tenia un grupo VW y un Xantia. El confort de marcha del Xantia daba mil vueltas al otro, sobre todo en baches, pero con mucha diferencia.
Yo tuve un GS y después un BX, me gustaba mucho la suspensión y creía que todo lo demás era muy malo hasta que probé un Alfa 156 y me di cuenta de que "los demás" no eran tan malos.
Yo tuve un GS que compré de tercera mano y después un BX y tampoco tuve problemas con la suspensión. Mis hermanos y mis tíos también tuvieron CX, BX, Xantia y XM. El único que se quejaba era uno de mis tíos que sí que tuvo problemas con la suspensión del XM.
Quizás nuestro caso es raro, pero de verdad que nos salió a todos muy bien. El único díscolo en la familia he sido yo que pasé a Alfa y no fue por problemas sino porque me gustaba más el coche, el resto siguen todos con Citroën.
Tuvo todos los famosos fallos del motor FAP de 110 CV, a la suspensión hidractiva le tuvimos que cambiar un par de esferas en su 1er año de vida (menos mal que lo cubrió la garantía), y con 4 años se fue otra esfera que, junto a un par botecitos de aceite color naranja (no recuerdo su nombre o viscosidad), nos costó un ojo de la cara.
Para colmo la electrónica hacia alguna que otra tontería cada vez que pasaba por el taller y se le desconectaba la batería. Teníamos que esperar un par de horas a que a la centralita le diera la gana de funcionar y no nos dijera "anomalía antirrobo" en la pantalla para poder arrancarlo. Una broma de mal gusto, vaya.
Se vendió a los 7 años completamente reparado y con entre 250.000 - 300.000 km, y desde entonces nos propusimos que no íbamos a comprar ningún Citroën más. Una lástima porque éste era un coche bastante cómodo, y si te querías dar alguna escapada a algún sitio con terreno irregular, subías la suspensión y no temías por los baches ni nada por el estilo.
Lo de los amortiguadores del otro vehículo... estaban en perfecto estado. Y si, con el tiempo le cambié los que tenía porque perdió tacto, también cambié las esferas al Xantia.
Por cierto que un amigo tenía otro idéntico, mismo modelo, color y hasta letra de matrícula: mismos problemas. Salió una serie muy pero que muy mala. En cambio otros que conozco con los de la serie 2 y con los modernos y ni una queja.
Un detalle que muchos no saben: la suspensión subida del todo no es para circular ni para pasar baches, nunca, jamás. Si lo dejas caer de un bordillo con la suspensión así puedes sacar un amortiguador por arriba porque están en máxima extensión y bloqueados, no tienes suspensión, es como si estuvieran soldados, así que se va a llevar el impacto de golpe. Es sólo para cambiar la rueda, nada más. Añadieron una posición elevada intermedia para esos momentos complicados y, en los modelos más nuevos como el C6, un sensor lo elevaba cuando encarabas una rampa de garaje, por ejemplo.
El detalle que das al final lo pone a medias en el manual, libro que mucha gente no sabe ni que viene en la guantera, y digo "a medias" porque no tenía ni idea de que bloqueaba la suspensión.
Si mal no recuerdo, al subirlo al máximo te salía un mensaje poniendo STOP en el ordenador de a bordo, y en cuanto te movías unos metros volvía a la posición intermedia automáticamente, que sólo podías usar si ibas a menos de 40 km/h.
Yo una vez lo usé para saltar una mediana en una calle cortada (de acera pero bastante alta) y me quedé flipado de los golpes que daba. Luego se lo comente al mecánico, sacó el manual, abrió el capó y me explicó el porqué. Nunca más.
También tuve un colega muy cafre que a su GS Palas le hizo perrerías a más no poder.