Si creen que lo de ametrallar las terrazas de los cafés lo inventaron los terroristas islámicos en la terrible matanza de París de 2015, están equivocados. El invento fue en Madrid en julio de 1936. El día 3 murieron así dos falangistas que tomaban el fresco en una terraza de la calle Torrijos (hoy Conde de Peñalver); el día 4 ametrallaron a dos militantes del sindicato socialista UGT en otra terraza de la calle Gravina.
|
etiquetas: julio del 36 , sarajevo español
Y Franco me importa un pepino, me da igual que esté enterrado en El Valle de los Caídos, o en el cementerio de Villabotijo de Abajo, como me da igual que Stalin esté enterrado junto al muro del Kremlin en la Plaza Roja de Moscuó, o que el Faraon Tutmosis III esté en el Valle de los Reyes junto a la ciudad de Luxor.