La degradación de los edificios y el elevado coste del suelo expulsan a los habitantes jóvenes y convierten la capital portuguesa en una ciudad cada vez más despoblada. El corazón de Lisboa está envejecido. Este es el diagnóstico de Helena Roseta, concejal de vivienda, al describir el despoblamiento de la capital portuguesa y el abandono de muchos edificios. Las casas desocupadas abundan en el centro histórico. Es una imagen que se repite hasta en las zonas más cotizadas.
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Pero sí, Lisboa ha evolucionado para mal en los últimos años. Pasearse hoy de la Plaça del Rossio a la Plaça do Comercio por Augusta equivale a sufrir el acoso de rateros y gente ofreciéndote todo tipo de drogas. Alfama mantiene su encanto extraño, de todas maneras.
"muchos propietarios dejan que las casas estén al borde de la ruina, para lograr su demolición y construir un inmueble con más pisos y más rentable"
Resulta que se habían planteado abrir una ventana hacia un patio pero les habían comentado que no se podía alterar la fachada del edificio, aunque fuese a patio.
Así pues lo que hicieron fue abrir la ventana... y pedir permiso oficialmente para cegarla.
Por supuesto la respuesta oficial de la administración municipal fue que esa ventana no se podía tapiar.
Cosas de la lógica burocrática cuando se quiere congelar en el tiempo una ciudad.
www.meneame.net/story/detroit-es-el-abismo
A ver si dejamos de ir soltando eslóganes y leemos un poquito.
#11 Cierto, a nosotros nos ofrecían constantemente y eran todos gitanos, al menos en nuestro caso.
Espero que con la excusa de la capital del vacío no la jodan de arriba a abajo, igual que han hecho con BCN en los últimos 20 años.
La degradación de la zona central seguida de un inevitable vaciamiento de la misma (y muchas veces de una inseguridad incontrolable), es una de las principales características de las ciudades latinoamericanas. Generalmente, el proceso se invierte cuando determinadas políticas del estado incitan la renovación de toda el área, sin que esto signifique hechar por la borda su patrimonio histórico. Habrá que balancear ambas situciones; está demostrado que congelar una ciudad no es sinónimo de poner en valor su patrimonio, y mucho menos generar una ciudad apta para la vida social.