La semana pasada me autocensuré. No es frecuente y me costó, pero lo hice. Escribí un párrafo y al releer el artículo volví sobre él, dándole vueltas. Había escrito: respondí que una gabardina corta, amén de poco práctica, era una mariconada.
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etiquetas: arturo , pérez-reverte
La corrección política nos mandará a la mierda.
Yo siempre he creído que los comentarios eran para aportar algo, por que tienes algo que decir, pero en el caso de tu comentario no veo mucho aporte y esa gracia está bastante manida desde que sacaron a Pérez-Reverte en Muchachada Nui.
CC #5
Un ejemplo práctico: cuando El Jueves publicó una portada burlándose del rey y un juez dictaminó que había que eliminarla de los kioskos, eso fue censura. Cuando, meses después, El Jueves decidió no publicar una portada similar por miedo a que ocurriera algo similar, eso fue autocensura. Pero cuando El Jueves publica chistes sobre algún tema en concreto que ofende a una parte de la población (www.elperiodicomediterraneo.com/noticias/castellon/redes-estallan-publ) y es criticado por ello, eso no es censura. Eso es gente reaccionando y haciendo gala de su libertad de expresión.
Pero es que para gente como Pérez-Reverte, acostumbrada a hacer lo que le sale de sus santos cojones y a publicar lo que les da la gana sin recibir otra cosa que no fueran aplausos, flores y premios, que alguien le critique es "censura". Y encima cuando cede a dichas críticas, en lugar de hacer un ejercicio de, valga la redundancia, autocrítica, se lamenta porque se está "autocensurando".
Mira, Pérez-Reverte, vete a cagar. Tú y todos los "políticamente incorrectos". A ver si ahora no vamos a poder criticar lo que nos dé la gana porque si somos muchos criticando somos unos censores.
Me parece una forma patética de darse autobombo y vendernos el discursito de "ay, qué guay es ser políticamente incorrecto, uy que me censuran, qué rebelde que soy".
Lo mejor es que él mismo tumba su propia argumentación en las primeras líneas. Cambió "mariconada" por "gilipollez" y no pasó absolutamente nada, el mundo siguió girando y su artículo se entendió perfectamente sin utilizar un término claramente homófobo. ¡Oh, pobres nuevas generaciones de escritores, que no pueden utilizar vocablos homófobos sin que la gente se queje! ¡Gran catástrofe! ¡Lloremos por la pérdida de tan importante riqueza léxica!
La peor censura no es la impuesta por un tercero ya que hay grietas donde colar tu mensaje. La peor censura es la que te aplicas a ti mismo. A esa no te puedes escapar.
No es un tema menor.
Es triste ver a alguien de semejante nivel montarse paranoias así solo para soltar el discurso carca de "antes todo era campo".
Que no es por censurarte ni imponerte formas de pensar, es solo decirte que igual hay tontos soltando lemas baratos en ambos lados.