No hay libertad en la pobreza ni en la precariedad. El verdadero riesgo de que Madrid se convierta en Caracas no está en las políticas de izquierdas, sino en la creciente desigualdad que fomenta esta derecha
|
etiquetas: madrid , ayuso , educación , sanidad , igualdad
Como dice Escolar, la clave está en el condicional.
Hace poco vi la película Tigre Blanco, que para mi está al mismo nivel que Parásitos tratando básicamente el mismo tema. El protagonista, que es un proscrito de las castas inferiores de la India, en una carta que manda a un inversor Chino dice:
Indía, la mayor democracia del mundo. Ojalá desarrollaran antes infraestructura que democracia. No hay democracia si no están cubiertas las necesidades básicas, esta es la cruda realidad que a los neoliberales no les interesa asumir, es decir, el neoliberalismo es totalmente antidemocrático.
Para entender el concepto de libertad, hay tres paradigmas fundamentales. Los contractualistas, que pensaban la sociedad y el Estado como emergentes de un acuerdo voluntario entre individuos aislados unos de otros, el liberalismo de los economistas políticos que explicaban el bien común como el resultado natural del libre juego de los egoísmos individuales en la esfera económica y el marco establecido por Aristóteles y Rousseau, que también desarrollan pensadores como Maquiavelo, Spinoza, Rousseau, Hegel o Marx, marco que concibe al hombre como zoon politikón y de la polis como una totalidad orgánica anterior a las partes y, Rousseau amplia con su desarrollo de la “voluntad general” como una realidad sustancialmente distinta que la mera sumatoria de voluntades individuales o la voluntad de la mayoría. El concepto de democracia depende de si entendemos al individuo como un ser esencialmente social, que se desarrolla viviendo con otros y que sólo puede realizarse plenamente en el marco de la intersubjetividad. Si creemos o no que la vida en común es una realidad existente en sí misma y una premisa para el desenvolvimiento individual.
Mi tesis, con base materialista, es que la democracia si no funciona con el objetivo de otorgar las condiciones para ejercer la libertad real, no es más que otro tipo de totalitarismo.
Veo el problema desde Spinoza, libertad en positivo como potencia, no como Hobbes, libertad en negativo, como limitación. Spinoza entiende la libertad individual como conciencia de la realidad, actuando en consecuencia para potenciar lo social. Spinoza confía en la potencia del hombre libre, Hobbes entiende al hombre como un animal al que hay que domesticar.
Esto no trata de libertad, comunismo o fascismo. Ni siquiera trata de democracia.
Esto trata simplemente de pura y dura propaganda electoral
(nivel Goebbels, por cierto). Y Ayuso está ganando de sobra en lo que a este asunto respecta.www.meneame.net/story/ayuso-lider-mejor-valorada-iglesias-peor
- o puedes escoger el concertado si pagas sus tasas " voluntarias" o puedes llevar a tus hijos a ese colegio público problemático donde han concretado a los inmigrantes, alumnos problemáticos y apenas se invierte.
- o puedes ir a la concertada y evitar pagar las actividades y ver cómo tus hijos son marcados como los pobres excluidos de las excursiones y actividades.
Eso es de buenos gestores que solo tienen que regalar suelo público en barrios nuevos a la iglesia o el Opus y ya no hay que contratar profesores o mantener el colegio . En empleo público es comunismo
Y que conste que yo no tendré problemas para pagarlo.
Apliquemos todo eso a la libertad sexual:
¿Significa para ti "libertad sexual" que la sociedad ha de respetar mi orientación sexual o significa que la sociedad ha de facilitarme el acceso al sexo?
Aún así su respuesta podría ser
"el PP lleva 25 años en la comunidad de Madrid y tengo que elegir entre un colegio público hecho una mierda o un privado de calidad. ¿Por qué no elegir entre una pública de calidad y uno privado de calidad?"
Vamos, no que "educación pública de calidad" no haya sido un lema de la izquierda desde hace mucho
Utilitarismo kantiano, pasandose la ilustración por el forro y fetichismo del capital superando la estravagancia.