Miles de personas se han manifestado este viernes en la capital de Malí, Bamako, para protestar contra la blasfemia del islam después de que se difundiera un vídeo en el que un hombre hace comentarios insultando a la religión y pisando un Corán. El hombre en cuestión es, probablemente, seguidor del kemetismo (una religión nacida recientemente e inspirada en el antiguo Egipto). El Ministerio de Asuntos Religiosos de Malí ha condenado los actos y ha asegurado que su autor sería llevado ante la Justicia del país.
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"derechos humanos" dice... me pregunto qué consideran ellos "derechos humanos"... Al ministro ese le va a explotar la cabeza cuando entren en conflicto la justicia que le van a aplicar a ese pobre blasfemo con esos derechos humanos...
Pero llegados a este punto me gustaría hacer una reflexión.
En España, hasta hace 4 años, quemar la foto de la persona que encarna al jefe del estado y monarca de la nación era un delito tipificado en el código penal que se castigaba con penas de cárcel. Sí, se castigaba porque creo que en la cárcel no intentaban reinsertar a nadie para que aceptase el derecho divino de esa persona para ser el jefe de tu estado y el rey de tu país.
Tuvo que venir el tribunal europeo de derechos humanos para poner las cosas y a la justicia española en su sitio, como ya nos tienen acostumbrados los de fuera.
Como detalle, esta declaración no recoge la libertad de culto y permite la discriminación por razones religiosas, por lo que en este caso el ministro de justicia sí se está basando en los derechos humanos... de los ciudadanos de bien. Los herejes ya que se busquen otros derechos.