Ángel López Molina, buscaba donde alojarse mientras cursa un máster en Sociología en la Universidad Complutense de Madrid. El casero preguntó a Ángel de dónde era. Él respondió que de España. El casero insistió: «¿Y de qué parte?». «De Sevilla», indicó Ángel. Su interlocutor , entonces, soltó: «Te voy a ser sincero, no quiero que te moleste, pero no me gustan los andaluces. Dudo que nos llevemos bien». Ángel, sorprendido, respondió un escueto y educado «vale».
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etiquetas: andalucia , xenofobia
Me lo imagino y veo en mi bola de cristal que después se acaba descubriendo que el discriminador es de Múrcia, porque estas cosas siempre van así.
Traducido al castellano literalmente: No digas bestialidades.
Traducido al castellano con su significado real: No digas tonterías.
- Yo no, solo soy de Bildu, pero mis tres hermanos sí
- pero de que equipo de fútbol eres?
- del atleti
- ah, de Athletic de Bilbao
- no, del Atlético de Madrid
- ¡FUERA DE AQUÏ!
El caso de este señor es un caso aislado, toda la gente que conozco en Madrid es acogedora con el de fuera, y es lógico porque aquí casi todo el mundo es de fuera.
Lo que no tiene sentido es iniciar un debate identitario en base a un ejemplo aislado de un tipo al que no le gustan los andaluces. Y montar una noticia con eso, ni te digo.
no , lo siento no me van esas mierdas
Este verano he ido a sevilla y pff me daba una sensacion de delincuencia...