La compañía de banda ancha Ono tendrá que abonar 60.000 euros, según ha decretado el juzgado de primera instancia número cinco de Sabadell, por "intromisión ilegítima en el honor de un abonado", después de que facilitara sus datos a un registro de morosos sin contar con pruebas "fehacientes", según dio a conocer la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios. Visto en
www.negociame.com
Parece que esta vez a los señores de Ono les ha salido el tiro por la culata!