Siglo VI dC. Constantinopla era la flamante capital del renovado y esplendoroso Imperio Romano o imperio Bizantino (hasta el siglo V dC, mientras la parte occidental existió, el otrora Imperio Romano de Oriente), cuyos territorios se extendían desde Egipto y el Próximo Oriente hasta el sur de Hispania.
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De hecho muchos historiadores opinan que esos años fueron los peores de la Historia para vivir en Europa Occidental y la cuenca mediterránea en general por la terrible combinación de guerras, invasiones bárbaras, malas cosechas, mal clima (estudios recientes dicen que provocado por la erupción de un volcán) y la plaga Justiniana...
Quién sabe qué habría pasado de no haber ocurrido dicho fenómeno (erupción volcánica, mal clima y plagas), probablemente el impulso de Belisario no se habría detenido en Italia, podrían haber derrotado de seguido sin mucho problema a los visigodos e incluso arrebatar a los francos y burgundios el sureste de las Galias asegurando las fronteras de un renovado imperio y el "Mare Nostrum" (verdadero objetivo de Justiniano)... En fin, pura ucronía,...
Cuando se produce el avance de los musulmanes, ni los romanos orientales ni los persas estaban en condiciones de hacerles frente. La más reciente de las guerras era la bizantino-sasánida que había durado desde el 602 hasta el 628, dejando a ambos contendientes hechos polvo.