Hace algunas semanas, José Saturnino Martínez García, profesor de Equidad y Educación en la universidad de La Laguna (Tenerife), recibió un extraño y curioso correo electrónico en su cuenta profesional de clara naturaleza comercial. Se trataba de una empresa online que ofrecía sus servicios a estudiantes, tanto universitarios como de instituto, de cara a la realización de trabajos y proyectos académicos.
|
etiquetas: ull , universidad , tenerife , profesor , copiar
El redactor tenía que responder a ese mail a ver si así le hacían el trabajo mejor.
Lo mismo que hacen algunas academias..
Bueno, a lo mejor era un hijo de Pablo Casado.
Hace algunas semanas, José Saturnino Martínez García, profesor de Equidad y Educación en la universidad de La Laguna (Tenerife), recibió un extraño y curioso correo electrónico en su cuenta profesional de clara naturaleza comercial. Se trataba de una empresa online que ofrecía sus servicios a estudiantes, tanto universitarios como de instituto, de cara a la realización de trabajos y proyectos académicos.
Puede que a muchos les sorprenda, pero de hecho se trata de una práctica que viene siendo habitual desde hace años, y que cada vez parece gozar de mayor éxito entre el alumnado, en muchos casos ávido de deshacerse de las tareas escolares y universitarias para disfrutar de otras actividades, y dispuesto incluso a pagar si es necesario por recibir ayuda para librarse de dicha tarea.
Además, se garantizan, casi con total seguridad, recibir una buena puntuación o nota en el trabajo, pues quienes elaboran las tareas en su nombre pueden ser profesores de secundaria o licenciados en el paro. Tras recibir el correo, Saturnino Martínez García decidió responder haciéndose pasar por uno de sus alumnos, pidiendo que le elaborasen uno de los trabajos que recientemente les había encomendado, y recibió como respuesta una oferta para llevarlo a cabo, pero por 300 euros.
“Fue una manera de constatar que copiar ya no es una cosa artesanal. Antes veías por los pasillos de la universidad el teléfono de algún profesor de secundaria o un licenciado con inestabilidad laboral que se ofrecía a los estudiantes para hacerles un trabajo. Esto ha cambiado y se ha convertido en una estrategia empresarial agresiva”, asegura. Ahora, aparte de dar clases a sus alumnos, ha añadido una nueva labor a su plan diario: cazar a los tramposos."
Pedazo de titular.
Si lees otra vez mi comentario verás que pongo 3 o 4 frases hiladas además de un titular. Pero si a ti este "artículo" te parece correcto, pues perfecto. Yo sólo veo un intento de ampliar un titular muy paupérrimo, no aporta nada la verdad. Es más, habla de copiar cuando es redactar trabajos. Si aún siguiera el hilo pero no, sólo aporta un precio.
Un boli publicitario de esos que llevan un calendario retráctil enrollado dentro que se desenrolla tirando por un lado y al que se ha cambiado ese calendario de 15cmx15cm por papel cebolla escrito con rotring del 0,2.
O una tira de papel cebolla se 10cmX20cm sujeta con gomas en los tubos bajo la mesa y con un boli como tope que sirve para tirar. Cuando lo sueltas se vuelve a meter solo.
Folios escritos muy suave con lápiz del 2H que no se ve si estás a más de 50cm
Láminas de dibujo técnico en las que al hacer una perforas varias debajo con el compás en los centros de arco y algunos vertices. Luego las otras láminas salen solas porque no hay que medir.
Usar pásticos de trasparencia de 5cmx5cm impreso en una impresora de tóner con ARIAL 4 o 3 y llevarlos pegados por dentro del jersey en la parte de abajo. Los puedes poner en la mesa que no se ven. También se pueden imprimir en papel cebolla y así son "comestibles" y eliminables.
Fusilar un trabajo de internet cambiando todas las palabras posibles por sinónimos y cambia el también el orden en las frases para que no salten los programas antiplagio
Cualquiera de esos métodos es más "sofisticado" que pagara por qué te hagan un trabajo.