Yo llevo mirando viviendas desde hace un tiempo y la verdad que es bastante curioso ver como van apareciendo inmuebles cada vez a precios más bajos por metro, cómo otros van saliendo y cómo los particulares que siguen emperrados en vender sus cuchitriles infectos que parecen sacados de Silent Hill a casi 3000€/m2 o incluso más siguen ahí casi un año después anuncio destacado tras anuncio destacado. ¡A comer ladrillo, majo! Porque yo prefiero seguir compartiendo piso de alquiler hasta que todo vuelva a niveles algo más razonables. ¿Que no vuelven? Pues a seguir compartiendo piso mientras sigo ahorrando, que tampoco me voy a morir por ello.
Con ver los precios a los que venden los bancos las casas embargadas es suficiente, la compras por 200.000€, te la embargan, ellos la venden por 100.00€ y todabia sigue sobrevalorada. Pero la culpa de esos precios desorbitados es nuestra, por pagar. Un producto pierde su valor cuando no se vende.
El problema es que antes o después, habrá un porcentaje de gente asfixiada tan elevado que se paralizará la venta de pisos prácticamente por completo. Ojalá ocurra, estaría bien que aparecieran "ladrillos" hasta en los paquetes de matutano.
El problema es que como los bancos no quieren hacer frente a la devaluación de las casas que tienen en stock para no fastidiarse el balance, y a los que van a comprar una vivienda más barata les deniegan el crédito y a la vez le ofrecen alguno de los "chollos" de su stock, más caro, pero para ese si hay préstamo, así los precios siguen sin bajar lo que deberían haber bajado hace ya un par de años, por los buitres de los bancos.
Buff, pues si va a bajar el precio, se les tendrá que ocurrir otra cosa con la que arruinar a la gente y obligarlas a trabajar toda la vida explotados, porque sino el sistema falla. O inventan una "casa" nueva o tendran que inventar que sea imprescindible y que el precio de ello sea trabajar toda la vida.
De caer, le queda mucho tiempo. Pero caerá poco a poco, a medida que la gente se vaya desapalancando y los bancos se vean en la necesidad de vender. Caídas gordas de un año para el siguiente dudo que veamos.
Mas pronto que tarde, se tendrá que reajustar a una realidad poblacional y económica.