Estamos pagando la formación de los investigadores y de los sanitarios de Europa y Estados Unidos...

... a costa de la calidad de nuestra propia sanidad y nuestra ciencia.

O mejoramos las condiciones laborales de estos profesionales, o tendremos que sustituir sus plazas de formación universitaria por otros estudios cuyos resultados estemos dispuestos a aprovechar después, como restauración, turismo o albañilería.