Ideas sueltas de meneantes sueltos

El resultado es claro.

Por un lado, tenemos al PP con un aumento del número de votos traducido en un aumento del número de escaños resulta claro vencedor de las elecciones del 26J. Por otro lado, tenemos al PSOE que también, en cierto modo, resulta ganador. Las encuestas le vaticinaban una hecatombe. Aguanta la segunda posición aun perdiendo 5 escaños. El pasado viernes yo mismo hubiese firmado la dimisión de Pedro Sánchez la noche de las elecciones. No ha sucedido así.

Yendo al bando de los perdedores comenzaré por Ciudadanos. Gran perdedor de la noche electoral. Pierden en número de votos, en porcentaje de votos y en número de escaños. Yo resumiría lo sucedido con dicho partido en la siguiente frase:

Las ovejas vuelven con su pastor

Y por último hablaré sobre Unidos Podemos. La gran decepción. El más complejo de explicar. Debido a la naturaleza del propio partido hay muchísimos factores a tener en cuenta y seguramente se me pasen muchos de ellos. Os animo a que me completéis el texto con vuestros comentarios.

Comencemos, pues.

La suma de un partido a otro no significa que se sumen los votos de ambos directamente. Es más, lo más probable es que al juntarse dos partidos haya personas que no estén conformes con esa unión y dejen de votar. Si a esto le añadimos que hemos sumado más de diez partidos, la cosa no mejora.

Cambio de discurso. Ya no es los de arriba contra los de abajo. De la transversalidad a la izquierda pura y dura solamente para acumular más votos, más poder. El añadir a IU, partido claramente de izquierdas y que no se ha comido una rosca desde que tenemos democracia, solo ha lastrado el proyecto de Podemos. Mucho más si incorporas a la "gran coalición" un partido asusta viejas como el Partido Comunista Español.

Heteropatriarcado. LOL. En serio, esta palabra es mejor que la expresión núcleo irradiador.

Estupideces (a nivel de mitin) como ver un sinfín de diferentes banderas en las concentraciones que se han hecho. Banderas comunistas, banderas republicanas, independentistas, etc. Solo por eso ya puede haber gente que sienta rechazo. Pondré mi caso como ejemplo. Yo soy puramente republicano, pero no me identifico con la bandera republicana, es más, la repudio. ¿Por qué? Simple. La bandera republicana representa la Segunda República. Seguramente si estudiáis un poco dicho periodo encontrareis cosas con las que nos es identificáis a día de hoy.

Estupideces (a nivel de gobierno). Aquí hay la tira. A nivel local tenemos reyes magos (Madrid, Valencia), cambio en el uso oficial de lenguas (en Valencia escritos solo en valenciano, con el PP se tenían ambas lenguas en escritos oficiales). A nivel nacional tenemos espectáculos en el hemiciclo (con el bebé de la Bescansa, besos de paripé, proyectos de mal redactados).

Negociaciones mal llevadas. No sé si calificarlo con el tema de los sillones, lo de la cal viva o con qué calificarlo, pero hasta yo negocio mejor con mi banco mis prestamos que estos profesionales de la política (profesionales haciendo referencia a que son politólogos).

El tono de contienda del partido. El conmigo o contra mí. Los míos ángeles y los tuyos demonios. Mi programa es la puta hostia y el tuyo es una puta basura. No señores, no dividáis más la sociedad de lo que ya está. No se trata de restregarle a los votantes de otros partidos que tu partido es mejor que el suyo. No. Esto es algo que hace muy bien el PP y que Podemos también ha empezado a hacer.

El tono de contienda de lo que se ha calificado como cibervoluntarios. Joder con el acoso y derribo a los que piensan diferente en redes sociales y sobretodo aquí, en Menéame.

El referéndum de autodeterminación. Hasta hace poco era la única forma razonable de apaciguar el independentismo. Había otra forma, pero no era razonable. Bajarse los pantalones y dar más competencias a un par de comunidades “por ser especiales” no es el camino, solo crea desigualdad entre españoles. Pero como he dicho, hasta ahora era la única forma. Ahora y gracias a Reino Unido hay otra. Esperar. Dejar que los “independentistas” vean reflejado su futuro en el caso inglés. Si a una economía fuerte como la inglesa le está sucediendo lo que le está sucediendo ¿qué le sucederá a una economía en ruinosa como la catalana? Aquí puede parecer que los sentimientos juegan un papel importante pero la verdad es que el dinero es el dinero y si las cuentas no salen la cosa no funciona.

Refugiados bienvenidos. ¿No os habéis parado a pensar que quizá eso os quite votos? ¿De verdad pensáis que las personas somos buenistas? Es solo postureo.

Y por último, haced autocrítica. Quizá la culpa no sea de los demás. Quizá la culpa sea nuestra.