Es una paradoja léxica cuando menos. Resulta que la pista de 'hielo ecológico' instalada en El Arenal de Bilbao con motivo de las celebraciones navideñas no es de hielo -es sintético- y tampoco parece ser tan ecológica como se pintaba 'a priori'. Los vertidos de plástico a la ría, revelados por este periódico la pasada semana, han puesto en duda ese valor. El Ayuntamiento, pese a todo, sigue defendiendo a capa y espada las bondades de la infraestructura. «Más allá del nombre de carácter comercial, valoramos que poner una pista de hielo natural
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