La sociedad protectora de animales británica consiguió una victoria en su cruzada contra quienes juegan a tragarse pececitos de colores vivos con su cerveza, con la condena a un joven a pagar una multa. Gavin Hope, un comercial de 22 años, fue condenado a pagar 330 libras, unos 400 euros, en daños y perjuicios más los costes judiciales, según informó este miércoles el diario The Guardian.
|
etiquetas: curiosidades