El juez Adolfo Carretero está estudiando el embargo preventivo de los bienes de Luis Medina y Alberto Luceño en la causa en la que se les investiga por el presunto cobro de hasta 5 millones de euros en comisiones por la compra de material sanitario. Un embargo preventivo no implica que el afectado pierda los bienes de manera inmediata. Su objetivo es garantizar que una futura sentencia condenatoria se cumpla, es decir, sirve como una medida cautelar para que las autoridades se aseguren de que la deuda pendiente se terminará saldando.
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