El primer rapero suizo en lograr las mayores ventas discográficas se convirtió en noticia con sus ataques al ministro de la derecha nacionalista. Para Stress, las dificultades que encuentra Suiza en los ámbitos de la integración y la juventud anuncian años difíciles.Nacido en Estonia, Stress llegó a Suiza a los 12 años. La salida de su tercer álbum ('Renacimiento'), el mes pasado, en el que mezcla hip hop, rock, soul y pop suscitó polémica. Ser rapero, inmigrante y de izquierdas en Suiza no parece ser un billete a la fama (política claro)