La presión mediática, de nuevo, ha producido frutos, y poco después de que el caso de la mujer que okupó una habitación de una vivienda en contra de la voluntad de sus inquilinos saliera a la luz pública, esta abandonó la casa, llevándose consigo todas sus pertenencias. La versión es sensiblemente diferente según quien la cuenta, y así, la supuesta 'okupa' ha explicado a la televisión autonómica TV3 que había entablado un acuerdo verbal con la familia, para alquilarles una habitación a cambio de 200 euros al mes.