Quienes se percataron de este hecho lo pusieron en conocimiento en primer lugar del propio centro sanitario, donde, según uno de los vecinos denunciantes, "el trato que nos dispensó una persona que se encontraba en el mostrador de urgencias fue bastante desagradable, pues prácticamente nos echó de las instalaciones y con muy malos modos, desentendiéndose de esta circunstancia". Por ello, acto seguido, este ciudadano se puso en contacto con la Policía Local, que destacó al lugar a un agente que se hizo cargo de las diligencias.