Serán 30 pisos de protección oficial a precios inferiores a 300 euros mensuales para jóvenes, construidos a partir de reciclar contenedores industriales de mercancías. «Una vez construidos», explica el arquitecto , «nadie detectará si son construcciones modulares hechas a partir de contenedores», ya que del cajón metálico solo se aprovechan sus propiedades: disponibilidad, bajo coste, fortaleza y manejabilidad. Según Isern, «serán construcciones de una gran calidad arquitectónica», con la misma durabilidad que las de hormigón.