Unas 30.000 personas en España carecen de un hogar donde vivir, y el número de mujeres y jóvenes en esta situación es cada vez mayor.Las razones por las que llegaron a la calle son variadas e incluyen desde la pérdida de la pareja o el empleo, hasta las deficiencias del sistema de protección social para atender sus necesidades y la autopercepción de fracaso. La persona sin techo, de alguna manera siente que la sociedad la excluye, la margina y la culpa de esa situación.