La raíz del término francés ‘amateur’ es el verbo ‘amar’. Un ‘amateur’ es una persona que hace algo por amor, no por dinero; que recibe satisfacción por el mero hecho de llevar a cabo una actividad, aunque ello no le proporcione beneficio económico. Un ‘amateur’ no recibe compensación económica, sino de otro tipo: prestigio, placer en el trabajo bien hecho o satisfacción de su curiosidad. La tecnología ha quitado las cadenas a los ‘amateurs’ y eliminado las protecciones de que disfrutaban en muchos campos los profesionales.