En China. Según la dueña, un montón de hembras practicaron con el gato actos sexuales, y al poco tiempo se le vieron dos bultos en la espalda. En un mes tenía dos alas de carne y hueso, y ahora ya es un gato ángel. Los expertos dicen que debe ser una mutación genética y que no tiene nada que ver con las hembras de antes, y en todo caso el gato puede hacer una vida normal. Visto en Geekologie y traducido por mí.