(C&P) El juzgado de instrucción número 8 de Madrid, que imputó a los 35 detenidos en la manifestación del 25-S por resistencia, atentado y delitos contra las instituciones del Estado, se ha inhibido ahora a favor de la Audiencia Nacional, según un auto dictado esta mañana. Decisión llamativa una vez que el juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, decidiera devolver la causa a los juzgados ordinarios, tras valorar que los delitos de los manifestantes se limitaban a “atentado, lesiones, resistencia, desobediencia y desórdenes públicos”.