Internet es una herramienta educativa sin precedentes. Nunca antes los estudiantes habían contado con semejante volumen de información. Un acceso ilimitado a cientos de recursos, desde bibliotecas, revistas científicas y enciclopedias actualizadas al minuto, hasta mapas, archivos, fotografías y vídeos. "Es como un espejo mágico en el que hacer aparecer lo que se necesita. Es el sueño de cualquier maestro", resume Pere Marquès, profesor del departamento de Pedagogía aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona