Uno de cada dos londinenses cree en fantasmas, según un estudio divulgado esta semana. Y en Londres, más que en cualquier otro lugar del Reino Unido, se cree en la existencia de fenómenos sobrenaturales, sea la cabeza incorpórea de Oliver Goldsmith o los gritos infantiles en la estación de metro de Bethnal Green. los fantasmas forman parte de la espiritualidad contemporánea, un amasijo de creencias sobrenaturales, cristianas, hindúes, budistas, musulmanas y científicas, en que cada cual construye su propia religión.