"Aparato Portátil de Rayos X Sánchez". Así se llamaba el invento de Mónico Sánchez Moreno, ingeniero nacido en Piedrabuena (Ciudad Real), patentado por él en 1911 y construido en el Laboratorio Eléctrico Sánchez, de su propiedad. Fue tal el éxito de su invento que Francia, en la Primera Guerra Mundial, dotó a sesenta de sus ambulancias con otros tantos aparatos de Rayos X portátiles. Hasta no hace muchos años, su invento aún fue utilizado por numerosos servicios médicos rurales.