Las mujeres dedicadas a la producción de arte fueron una minoría en la Edad Moderna, pero no por ello menos importantes. En su obra “El Renacimiento italiano. Cultura y sociedad en Italia”, Burke comenta que hay investigaciones que muestran la existencia de un pequeño grupo de mujeres cultas interesadas en el Humanismo, algo que nos hace pensar que por entonces, la mujer tenía una curiosidad, una necesidad de aprendizaje cultural, a pesar de tratarse de un mundo eminentemente masculino. Progresivamente, se empezó a gestar el cambio..