Luis, sé fuerte si te desahucian hoy, o si lo hicieron ayer. O si, al final tu nombre sale en la lista de un despido. O si el juez estima que tu despido es procedente. Luis, sé fuerte,que los críos no noten que estás suicida u homicida, que es casi peor. Que no vean que el padre que adoran, ese ser indestructible y poderoso está hundido de dentro hacia fuera porque aunque conserva la fuerza para trabajar no tiene dónde hacerlo. Luis, hundido, ya no es el mismo, a ratos no lo es y esa desgracia, esa sensación de ruina.